LA FOTO MAS REPETIDA TENIS

Con 27 y 26 años respectivamente, Rafael Nadal y Novak Djokovic se enfrentarán esta noche (23.00 h., Eurosport, en vivo) por 37º ocasión. Ningún emparejamiento se ha repetido tantas veces en la 'era Open', ni siquiera el McEnroe-Lendl, que vivió su último capítulo en 1992 tras la victoria del tenista de Ostrava en los cuartos de final del torneo de Toronto. Lendl se impuso en los seis últimos duelos para cerrar la serie con un 21-15 favorable.
En ese punto se encuentran hoy Nadal y Djokovic, que sin ser amigos sí se miran con mayor respeto que los dos viejos campeones. En este caso, es el español quien suma seis triunfos más que el serbio tras imponerse en cinco de la última media docena de encuentros, reacción tremenda del balear tras encajar siete derrotas consecutivas entre marzo de 2011 y enero de 2012. Es esta inercia la que hoy concede a Nadal el papel de favorito en su tercera final del US Open, la tercera ante su rival más temible. Ganó la de 2010 y perdió la de 2011.
La igualdad y el respeto son máximos antes de la cita. "Preferiría jugar contra otro", admitió Nadal tras batir a Richard Gasquet y alcanzar otra final, la duodécima del curso en 13 torneos disputados (nueve títulos). Exhibe músculo el balear, invicto este año en superficies duras (21-0), apenas tres decepciones en lo que va de ejercicio (59-3), a punto para afrontar con garantías su decimoctava final de Grand Slam (12-5), a la que llega tras haber cedido un solo set y un 'break' (ante Gasquet). Por todo esto dice Djokovic que no existe un reto mayor en su deporte que cruzarse con su rival de esta noche.
"Es el competidor perfecto. Lucha por cada bola y probablemente está jugando el mejor de su vida en pista dura", concede Djokovic. "Este año sólo ha perdido tres partidos, así que sin ninguna duda es el mejor tenista del año hasta el momento". Tanto que su posición al frente del 'ranking', tan cómoda al comienzo del curso, corre serio peligro tras el verano espectacular de Nadal, más agresivo, valiente y contundente que nunca, cualidades clave para desarmar hoy al tenista de Belgrado. Después de conquistar los títulos de Montreal y Cincinnati y clasificarse para la final del US Open, Nadal es virtualmente número uno de mundo. Lo sería mañana si 'Nole' hubiera caído ante Wawrinka en las semifinales, pero aun con una victoria del serbio esta noche, muy mal debería hacerlo Nadal en la recta final de la temporada (gira asiática, con el Masters 1.000 de Shanghai, e 'indoor', con el de París y la Copa Masters) para no finalizar en lo más alto del 'ranking' por tercera vez en su carrera.

cortesia elmundo.es