Argentina adoptó medidas que desactivaron el ingreso de asado uruguayo a ese mercado; durante julio no se cumplió ningún embarque y desde febrero hasta junio pasado solo se vendieron 328 toneladas de carne vacuna. La situación responde a una decisión de las autoridades del vecino país que agregó a los trámites aduaneros, una autorización para ingresar el citado producto, lo que provocó que desde febrero pasado se demoraran los negocios .El tema del asado uruguayo estuvo en el tapete en las últimas horas en Buenos Aires, cuando el presidente de la Sociedad Rural Argentina, luego de sus afirmaciones en el marco de la Rural de Palermo fue acusado de “golpista” y “mentiroso” por senador Aníbal Fernández en la relación a la importación de carne que hace Argentina, y al "desestímulo oficial a la producción ganadera" que promueve el gobierno. Se sostuvo que Argentina está importando asado uruguayo desde hace dos años y que los negocios se habían paralizado hace 15 días.Un vocero industrial de Uruguay indicó que la medida argentina le exige a los interesados, sendos permisos de importación como forma de proteger su mercado. El permiso debe ser gestionado ante la Secretaría de Agricultura que en muchos casos demora el trámite e incluso a veces no llega a otorgarlo. En estas condiciones es casi imposible hacer los negocios, porque el asado se exporta en fresco, no va congelado, lo que requiere de una rápida autorización para ingresar en condiciones y para mantener los detalles acordados en el negocio. Se menciona que algún camión que esperaba en frontera esperando para cruzar, debió regresar con la mercadería por no estar en buenas condiciones luego de esperar infructuosamente varios días el premiso oficial argentino. El Uruguay vende asado también a Brasil, pero el principal mercado es Argentina que paga precios superiores, incluso unos US$ 200 por encima del mercado local. En Uruguay se cotiza alrededor de US$ 3.100 la tonelada.
cortesia elobservador.com
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