La conmoción que generó hoy el anuncio de que la mandataria argentina, Cristina Fernández, tendrá que ser intervenida mañana para la "evacuación quirúrgica" del hematoma cerebral que le fue diagnosticado el sábado, trae a la memoria los recientes episodios de otros gobernantes.
El caso más reciente es el del venezolano Hugo Chávez, quien murió en marzo pasado tras luchar durante 20 meses con un cáncer, una enfermedad que siempre estuvo rodeada por un hermetismo absoluto y aún hoy no se sabe qué tipo de cáncer padecía.
Chávez fue el único que dio alguna información sobre su propia enfermedad de manera pública, explicando con sus palabras datos sobre el tumor que le fue detectado en junio de 2011 como que era del tamaño de una pelota de béisbol y que estaba encapsulado en una zona de la pelvis que nunca precisó. Además, tachaba de "morbosos" a quienes exigían un pronóstico médico.
cortesia elobservador.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario